Mismos perros con distintos collares

No me creo -como la práctica totalidad de los/as españoles/as -nada de esta nueva tregua de los terroristas de ETA que han vuelto a hacer pública de la misma manera (encapuchados y sin dar la cara). Parece evidente, tal y como se manifiesta de manera mayoritaria tras el nuevo anuncio, que lo que esperábamos todos no es lo que se ha anunciado. Mientras no haya una entrega de las armas, una mediación internacional y una mayor especificidad y contundencia, nada parece ser distinto a lo del pasado. Mero teatro y una aparente estrategia para salir del atolladero en el que parece estar sumida esta panda de asesinos, que ahora quieren ejercer de buenos/as con tal de acercar posiciones cara a los próximos procesos electorales, tomar aliento ante este caos interno y poner a punto la maquinaria de muerte que siempre han utilizado como motor de su existencia.

Digno de alabar es también la contundencia del gobierno vasco y Patxi López, que por primera vez en muchos años planta cara a los terroristas y se suma a este clamor de incredulidad que parece inundar la opinión pública de nuestro país.

Todo esto huele a debilidad, a tiempos de vacas flacas y a avances notables en la lucha antiterrorista que ejerce el estado de derecho, que parece estar dando sus frutos. Ahora solo cabe perseverar, no ceder ni un ápice y seguir apuntillando a esta lacra con la unidad, la firmeza y la lucha judicial y policial.

Estos/as del vídeo son los mismos perros (interprétese este calificativo según la RAE) con distintos collares.