Vara ridiculiza a Monago
Como se suele decir "si no lo digo reviento". Pues yo, si no dedico unos minutos a este post , algo me quedo dentro sin comunicar. Algo que entiendo es importante, y que aunque peco con toda seguridad de mucha parcialidad y se me verá el plumero antes de sacarlo, no por ello dejaré de expresarlo, máxime en un espacio del que soy propietario, y con el respeto que siempre les dispenso a mis lectores y seguidores.
Como sabéis ayer y hoy el Parlamento extremeño ha vivido uno de los momentos políticos más esperados -sobre todo para quienes nos gusta la política- y que ha servido para repasar o mejor dicho "orientar" la estrategia de gobierno de la Junta de Extremadura, o lo que es lo mismo del ejecutivo que preside Fernández Vara. Ayer no tuve oportunidad de seguir nada del debate aunque hoy ya he tenido oportunidad de leer el discurso del Presidente, las medidas propuestas y las reacciones de todas las entidades que en cierto modo participan de la política o forman parte del entramado en el que se desarrolla.
Hoy, sin embargo mientras revisaba papeles en la oficina escuché con detenimiento por Internet las intervenciones del Presidente y de quien aspira a serlo, y tengo que reconocer que me he quedado tremendamente prendado con la intervención de Guillermo, con su claridad expositiva, con sus argumentos y sobre todo con su coherencia y con su integridad política. No me cabe duda de que estoy ante un político que madura con el tiempo, que mejora cada día y que cautiva en muchos aspectos. En mi opinión y entiendo que en la opinión de todas las personas que han seguido el debate -independientemente de la condición u opción política con la que cada cual se identifique- Fernández Vara ha dejado en ridículo a Monago, sacándole los colores varias veces con sus opiniones contradictorias, con su predicación poco ejemplarizante, etc... Comprendo que no lo ha hecho a mala fe o porque esa fuera inicialmente su estrategia, sino porque su discurso político sigue construyéndose sobre la verdad del día a día, sobre los problemas de los/as extremeños/as y sobre una realidad social que conoce bien, que para eso se patea Extremadura desde que fuese elegido candidato del PSOE a la Junta de Extremadura, allá por diciembre de 2006 - si no me falla la memoria- y lo sigue haciendo, en primera línea de fuego y asumiendo su responsabilidad en mi opinión de manera excesiva.
Vara ha convencido, y eso es realmente importante en los tiempos que corren y con la que está cayendo. Las intervenciones de hoy me han traído a la memoria otros debates anteriores, con otros protagonistas diferentes, lo cual me ha relajado, sobre todo porque sé que siguiendo este camino la ciudadanía seguirá apostando por el proyecto socialista y porque por encima de una Presidencia o una Secretaría General del PSOE regional, el señor Guillermo Fernández Vara, sigue siendo una buena persona y además un político de altura que crece día a día, lo cual es buenísimo para una tierra como Extremadura y para sus ciudadanos/as.
Si no lo escribo, reviento.
Hoy, sin embargo mientras revisaba papeles en la oficina escuché con detenimiento por Internet las intervenciones del Presidente y de quien aspira a serlo, y tengo que reconocer que me he quedado tremendamente prendado con la intervención de Guillermo, con su claridad expositiva, con sus argumentos y sobre todo con su coherencia y con su integridad política. No me cabe duda de que estoy ante un político que madura con el tiempo, que mejora cada día y que cautiva en muchos aspectos. En mi opinión y entiendo que en la opinión de todas las personas que han seguido el debate -independientemente de la condición u opción política con la que cada cual se identifique- Fernández Vara ha dejado en ridículo a Monago, sacándole los colores varias veces con sus opiniones contradictorias, con su predicación poco ejemplarizante, etc... Comprendo que no lo ha hecho a mala fe o porque esa fuera inicialmente su estrategia, sino porque su discurso político sigue construyéndose sobre la verdad del día a día, sobre los problemas de los/as extremeños/as y sobre una realidad social que conoce bien, que para eso se patea Extremadura desde que fuese elegido candidato del PSOE a la Junta de Extremadura, allá por diciembre de 2006 - si no me falla la memoria- y lo sigue haciendo, en primera línea de fuego y asumiendo su responsabilidad en mi opinión de manera excesiva.
Vara ha convencido, y eso es realmente importante en los tiempos que corren y con la que está cayendo. Las intervenciones de hoy me han traído a la memoria otros debates anteriores, con otros protagonistas diferentes, lo cual me ha relajado, sobre todo porque sé que siguiendo este camino la ciudadanía seguirá apostando por el proyecto socialista y porque por encima de una Presidencia o una Secretaría General del PSOE regional, el señor Guillermo Fernández Vara, sigue siendo una buena persona y además un político de altura que crece día a día, lo cual es buenísimo para una tierra como Extremadura y para sus ciudadanos/as.
Si no lo escribo, reviento.
Comentarios
Saludos.
NO SOY SOCIALISTA, PERO RECONOZCO QUE EN EXTREMADURA EL PSOE TIENE EL GOBIERNO ASEGURADO.