Impulso de la ciberpolítica

Mientras que en el Partido Socialista Obrero Español llevamos apostando por las nuevas tecnologías en los últimos diez años (dentro del partido y en las políticas que desde los territorios en los que gobernamos se vienen desarrollando) el principal partido de la oposición, el PP comienza a fliparlo con esto de las redes sociales. Curiosamente, su líder en Extremadura, el Señor Monago - en mi opinión bloguero de interés y no de vocación- siempre aprovecha la ocasión en los medios o en el propio parlamento extremeño para echarle en cara a Guillermo Fernández Vara su afición y apego a su rincón virtual, mucho más exitoso y visitado que el suyo y con un futuro muy prometedor, a juzgar por la evolución que ha experimentado y por las estadísticas del mismo.

El recién llegado a la Casa Blanca, Barack Obama, también sabe del impacto, repercusión e importancia de las nuevas tecnologías, y de como la denominada política 2.0, posiblemente cerca ya de la versión 3.0, es sin duda la mejor manera de llegar a la ciudadanía y de interactuar con ella. Está claro que el avance de la tecnología digital ha de servir para mejorar la comunicación social y las relaciones entre gobernantes y gobernados. Obama ya ha comenzado con ello, tal y como hizo en su campaña electoral y como parece haber empezado en estos primeros días de gobierno.

Espero que en Extremadura, quienes atacan de manera repetida al Presidente de la Junta por mantener abierto un blog, comiencen a agachar las orejas y a aprovechar también el auge y esplendor de las redes sociales, tal y como parecen indicarles sus jefes de Madrid que han descubierto recientemente su potencial.