San Blas regresa a su ermita

Hoy 28 de septiembre, los/as guadalupenses hemos visitado con carácter excepcional la Ermita de San Blas, monumento erigido en honor al santo, según tengo entendido contruido allá por el siglo XVI. La parroquia de Guadalupe encabezada por su titular Fray David Ortiz y muchas vecinos de La Puebla hemos celebrado la restauración de esta imagen devolviéndola a su altar, en su capilla una de las más emblemáticas de este pueblo y cuya romería -la del 3 de febrero- aún se mantiene viva, lo cual no es fácil dado los tiempos que corren. Sinceramente lo que me más me ha gustado o me ha impresionado de toda la jornada, ha sido la participación de muchos de los colectivos sociales del pueblo y un gran número de personas, imagino que cada cual con intereses distintos, incluidos los gastronómicos (comida y bebida gratis) ha querido estar presente, habiéndose vivido una jornada excepcional de convivencia y de hermandad, tengo que confesar que para mi insólita después de muchas romerías y muchos encuentros a los que había asistido en el pueblo.

Independientemente de las creencias, la fe o los motivos que cada cual haya tenido para participar en esta celebración extraordinaria, creo que ha sido una jornada distinta, amena y muy popular. Se han echado en falta algunos colectivos importantes de la localidad, pero cada cual sabrá sus razones por las que no han estado presentes. En fin, que esto demuestra -una vez más- que este pueblo nuestro, cuando se le toca la fibra responde como ninguno, y es en ese camino en el que desde la política, los colectivos sociales y los propios vecinos, hemos de movernos, por el bien de nuestro presente y sobre todo por el futuro de uno de los pueblos más importantes del mundo.

El trabajo de la restauradora Paloma Monedero has sido excepcional, algo que buena falta la hacía, a juzgar por las imágenes del antes y después que hemos visionado. Un hito más en las historia de este pueblo para la posteridad.