Indignación social con los eurocaraduras
Mientras se publican las cifras del paro en España que nos anuncian que sigue su tendencia alcista, o conocemos que quienes estamos inmersos en una hipoteca o préstamo vamos a tener que apretarnos aún más el cinturón (Sube el EURIBOR) , o que el vecino Portugal está pasándolas pardas y necesitará del rescate de la propia Unión Europea, las redes sociales, especialmente twitter (#Eurodiputadoscaraduras), han destapado o mejor dicho nos han informado de que los/as eurodiputados/as españoles/as apoyaban una votación en favor de algunos privilegios que más bien no parecen estar acorde con lo que la ciudadanía espera de sus representantes legítimos en unos momentos de crisis económica, donde más bien parece que lo razonable es predicar con el ejemplo.
Un hecho más de que algunos políticos gozan de algunos privilegios que nos hacen mucho que pensar y que nos debería hacer reflexionar sobre esta y otras cuestiones similares. Esto obviamente no significa que todos hagan lo mismo, pero sí denota que existe cierto hermetismo, cierto blindaje de algunos asuntos para los que casi siempre están de acuerdos los diferentes partidos y que en pocas ocasiones conocemos. Es sin duda una de las demandas exigidas por la ciudadanía, en ese ejercicio de responsabilidad y transparencia que no debe generar desconfianza, sino más bien ha de ser una obligación para quienes son elegidos y representan los intereses de los ciudadanos. Sólo así podríamos evitar situaciones como esta y sobre todo, evitar comentarios del tipo de este/a o aquel/la es un chupóptero/a.
Todos nos preguntamos qué hubiese pasado si esta polémica no sale a la luz y se mueve a través de la red, pero también en cierto modo nos alegramos de que la voz del pueblo vaya tenido algo más de protagonismo en la política.
Obviamente esto no da buena imagen de un partido y por eso, algunos como el PSOE ya han pedido perdón y han rectificado públicamente, lo cual significa que les importa -y mucho- la opinión de los/as ciudadanos/as.
Un hecho más de que algunos políticos gozan de algunos privilegios que nos hacen mucho que pensar y que nos debería hacer reflexionar sobre esta y otras cuestiones similares. Esto obviamente no significa que todos hagan lo mismo, pero sí denota que existe cierto hermetismo, cierto blindaje de algunos asuntos para los que casi siempre están de acuerdos los diferentes partidos y que en pocas ocasiones conocemos. Es sin duda una de las demandas exigidas por la ciudadanía, en ese ejercicio de responsabilidad y transparencia que no debe generar desconfianza, sino más bien ha de ser una obligación para quienes son elegidos y representan los intereses de los ciudadanos. Sólo así podríamos evitar situaciones como esta y sobre todo, evitar comentarios del tipo de este/a o aquel/la es un chupóptero/a.
Todos nos preguntamos qué hubiese pasado si esta polémica no sale a la luz y se mueve a través de la red, pero también en cierto modo nos alegramos de que la voz del pueblo vaya tenido algo más de protagonismo en la política.
Obviamente esto no da buena imagen de un partido y por eso, algunos como el PSOE ya han pedido perdón y han rectificado públicamente, lo cual significa que les importa -y mucho- la opinión de los/as ciudadanos/as.
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